El Poder de la Respiración

Buda recomendaba la practica de la respiración consciente como la mejor forma de balancear y purificar la mente.

En la práctica de la meditación, conscientemente ponemos la atención en nuestra respiración. Debemos pensar en la respiración como un caballo salvaje y nosotros como la persona montando y controlando al caballo. Cuando nuestra atención está totalmente en la respiración, es casi imposible que nuestra mente se vaya a los problemas o las cosas que nos molestan y en ese estado neutral, dejamos de lastimar a nuestra propia mente.

Sin embargo, esto no tiene porque ser algo aburrido. No importa que nuestra atención esté siempre en la misma respiración, una vez que hemos acumulado consistencia en nuestra practica, comenzaras a dar cuenta que comienzas a sentirte bien, sientes más balance y serenidad.

Nuestra mente es como un rio y a través de la respiración, podemos elegir no permitir que la corriente del rio nos lleve con sus distracciones. Si has estudiado la naturaleza, seguro te has dado cuenta de que, si dejas de contaminar un rio, el rio comienza su propio proceso de sanación. Lo mismo aplica para las propiedades sanadoras de nuestra mente.

La mente puede convertirse en su propia fuente de sanación y esto lo podeos lograr a través del poder de la respiración.

Si estás interesado en comenzar una practica simple de respiración consciente, comienza por lo menos con una sesión al día, aunque lo más recomendable son dos, una en la mañana y una en la noche.

En la tradición China y también algunos Yoguis en la India recomiendan hacer dos sesiones de 24 minutos de respiración consciente al día. Según una teoría antigua China, son 24 minutos los que se necesitan para que el qi, o las energías vitales del cuerpo, terminen un ciclo completo. En la India también consideran 24 minutos el tiempo ideal para comenzar tus practicas de respiración consciente.