Imaginación y Fe

Para tener éxito al meditar o rezar por algo, debemos establecer una conexión o un acuerdo entre la mente consciente y la mente subconsciente y esto lo podemos lograr a través de la imaginación y la fe.

La imaginación y la fe son las facultades mentales necesitadas para crear condiciones externas. La fe es algo que se puede obtener al sentir y aceptar la realidad del deseo, aunque los cinco sentidos lo nieguen.

La imaginación es el comienzo de todo lo visible y la fe es la sustancia de la cual aquello es formado. A través de la imaginación, aquello que existe en las profundidades de la conciencia es despertado y se le da forma.

Muchas de las curaciones que se le atribuyen a la medicina, en realidad, son solo el efecto de la imaginación y de la fe de la persona que toma la medicina. Es simplemente el hecho de aceptar que la medicina lo va a curar.

La mente subconsciente o subjetiva es completamente controlada por la sugerencia, sin importar si la sugerencia es verdadera o falsa. En el caso de un paciente enfermo que logra sanarse, fue la mente subjetiva del paciente lo cual aceptó la sugerencia de salud y lo que creó o restableció su salud.

Tener la expectativa de recibir es el estado mental por el cual podemos manifestar más rápido.

La mayoría de las personas, ya sea por muy poca emoción o por demasiado intelecto, los cuales son bloqueos para rezar exitosamente, se les hace difícil creer aquello que sus cinco sentidos están negando. Forzarnos a creer no es la solución y de hecho, esto hace que obtengamos peores resultados. Para evitar este problema, debemos entrar a las profundidades de nuestra mente a través de la meditación para poder llegar a ese lugar de silencio en donde podemos crear sin la intervención o análisis de los cinco sentidos.

Por esta razón funcionan los audios subliminales, ya que cuando la mente analítica o consciente no está poniendo atención de lo que se está creando en la mente, es cuando más resultados tenemos. Entre menos interrumpa la menos consciente, mayores serán los resultados.

La mente subconsciente es el conductor universal, el cual nosotros podemos modificar a través de nuestros pensamientos y emociones.

Los estados visibles de nuestra realidad son los efectos vibratorios de las vibraciones de la mente subconsciente dentro de nosotros o son las cusas vibratorias dentro de nosotros.

Una persona que es mentalmente disciplinada jamás permitirá que sean causas al menos que despierten dentro de el un estado de conciencia que signifique que la manifestación de un deseo.

Al conocer la ley de la reversibilidad, el hombre disciplinado transforma su mundo al imaginar y sentir solo aquello que es bueno y comienza a vivir cada día con la emoción de que su deseo u objetivo ya está manifestado o realizado.

Si el hombre disciplinado sabe que la manifestación de su deseo lo hará sentirse feliz y agradecido, entonces no espera a que su deseo se manifieste para sentir felicidad y gratitud, sino que comienza a SER feliz y agradecido ahora para manifestar su deseo ahora.