Ley Espiritual del Éxito #1- La Ley del Potencial Puro

La fuente de toda la creación es la conciencia pura. Es un potencial puro buscando expresión para ser manifestado. Cuando nos damos cuenta de que nuestro ser verdadero es potencial puro, nos alineamos con el poder que manifiesta absolutamente todo en este universo.

Esta ley se basa en el hecho de que, en nuestro estado más esencial somos conciencia pura. Esta conciencia pura es potencial puro, es el campo de todas las posibilidades y creatividad infinita.

Cuando descubrimos nuestra naturaleza esencial y descubrimos quienes somos en realidad, obtenemos la habilidad de manifestar cualquier deseo que tengamos, ya que nosotros mismos somos ese potencial.

Esta ley también podría ser llamada la ley de la unidad, ya que debajo de toda la infinita diversidad del universo encontramos la unidad de un solo espíritu, conciencia o inteligencia. No existe ninguna separación entre nosotros y este campo de energía.

¿Cómo podemos aplicar esta ley en nuestra vida? Una de las formas a tener acceso a este campo de energía es a través de la practica diaria de silencio, meditación y no juzgar. Pasar tiempo en la naturaleza también nos da acceso a las cualidades que componen este campo de energía, como creatividad infinita, libertad y alegría.

Practicar el silencio significa hacer el compromiso de pasar algunos periodos del día simplemente SIENDO. Significa que periódicamente, detienes o pones en pausa la actividad de hablar en voz alta, ver televisión o incluso leer un libro. Es simplemente una oportunidad para calmar tu dialogo interno.

La practica de la meditación es la forma más rápida para aplicar esta ley, especialmente si practicas en la mañana y en la noche por mínimo, treinta minutos cada sesión. A través de la meditación podemos percibir este campo de pura conciencia, donde se encuentra todo nuestro poder de creación.

Aprender a entrar en silencio y quedarnos quietos por periodos de tiempo es esencial para manifestar nuestros deseos, ya que en ese silencio y en esa inactividad esta nuestra conexión con este campo de potencial puro.

La tercera forma de acceder a este campo es a través del acto de no juzgar. El juicio es la constante evaluación del mundo externo e interno y esta evaluación crea una turbulencia que afecta nuestro flujo de energía, el cual crea un bloque entre nosotros y este campo de potencial puro.

Cuando dejamos de juzgar, creamos silencio en nuestra mente. Es buena idea, comenzar nuestros días recordando la importancia de que este día, no juzgaremos a nadie ni nada, incluyéndonos a nosotros mismos.

A través del silencio, la meditación, y el no juzgar, obtenemos acceso a esta primera ley espiritual del éxito.