Ley Espiritual del Exito #7- La Ley del Dharma

Todos tenemos un propósito en la vida, un regalo o un talento especial que podemos compartir con los demás. Cuando combinamos este talento con el servicio a otros, exaltamos nuestro propio espíritu, lo cual debe ser el objetivo principal de todas nuestras encarnaciones.

La séptima ley espiritual del éxito se basa en el principio de que cada uno de nosotros ha manifestado un cuerpo físico para manifestar o completar un propósito.

Según esta ley, todos tenemos un regalo o un talento único. Hay algo que puedes hacer mejor que todos los demás.

Hay varios componentes para esta ley. Primero, el principio de que, antes que nada, debemos encontrar nuestro propio ser y entender que somos seres espirituales viviendo en un cuerpo físico. Cada uno de nosotros está en este plano para encontrar este ser espiritual.

El siguiente componente es que debemos expresar nuestros talentos. Tienes un talento único y solo tu eres capaz de expresar ese talento de esa forma, nadie más en el mundo puede expresarlo de la forma que tu.

El tercer componente de esta ley es el servicio a la humanidad y esto comienza con la pregunta “¿cómo podemos ayudar a otros?” Recuerda que solo al incrementar nuestro valor y servicio a la humanidad es cómo podemos sintonizarnos a una abundancia permanente así que siempre hay que preguntar, “¿cómo puedo ayudar?” en vez de preguntar “¿que voy a ganar yo?”.

Si quieres realmente aplicar la ley del dharma en tu vida, debes comprometerte a tres cosas.

Primero, comprometerte a buscar tu ser interior, el cual es el ser verdadero que va más allá del ego y esto lo logras a través de la meditación.

El segundo compromiso que debes hacer es descubrir tus talentos únicos y sabes cuando encuentras un talento único porque cuando lo haces, pierdes noción del tiempo y fluyes en el momento presente.

Y el tercer compromiso que debes hacer es asegurarte de siempre preguntarte cómo puedes ayudar a otros en vez de solo enfocarte en tus intereses personales.