¿Qué Pasa En Tu Cerebro Cuando Sientes Ansiedad?

Según un reporte hecho en el 2006 por Instituto Nacional de Salud Mental en Estados Unidos, aproximadamente 40 millones de ciudadanos de Estados Unidos sufren de algún tipo de ansiedad. Eso fue en 2006, ahora imagina cómo ha incrementado ese numero con todos los eventos del mundo actual, así como el incremento de redes sociales.

De cierta forma, la ansiedad, es la forma natural de nuestro cuerpo al responder a algún estimulo externo. Nuestro cuerpo necesita sentir esa ansiedad para poder lidiar con el peligro, ¿pero qué pasa cuando sentimos ansiedad cada minuto de nuestros días cuando no existe ningún peligro real?

Un desorden de ansiedad se forma cuando, por ninguna razón aparente, una persona comienza a sentir que su corazón late más rápido, le cuesta trabajo respirar y siente miedo y dolor en el pecho, así como confusión mental.

Los ataques de ansiedad son creados cuando alguien ha acostumbrado a su cuerpo a mantenerse en modo de sobrevivencia todo el tiempo. Cuando una persona vive en este estado de ansiedad, su actitud, la cual es el resultado de ciertos grupos de pensamientos, comienza a crear químicos de ansiedad, miedo y preocupación.

Si todos los días nos preocupamos de lo que puede llegar a pasar en el futuro, comenzamos a activar una serie de pensamientos que van a crear estrés en nuestra mente, lo cual solo activará más memorias del pasado que tengan que ver con el estrés y la preocupación.

Cuando esos pensamientos activan ciertas conexiones sinápticas en el cerebro, el cuerpo comienza a crear esos mismos químicos y como resultado, esos químicos ahora están sueltos en el cuerpo.

Una vez que el cerebro se da cuenta de cómo el cuerpo se está sintiendo, decimos algo como “me siento preocupado”. Cuando nos sentimos preocupados, nos estamos volviendo conscientes del estado interno de nuestro cuerpo.

Una vez que estamos conscientes de que nuestro cuerpo está sintiendo ansiedad, la red neuronal en el cerebro relacionada a la ansiedad se activa y comenzamos a sentirnos de misma forma como estamos pensando y comenzamos a pensar de la misma forma como nos estamos sintiendo. Entramos a un ciclo vicioso que rápidamente nos puede llevar por un espiral muy negativo.

Para que el cerebro pueda reconocer las emociones de preocupación, necesita usar redes neuronales existentes relacionadas a la preocupación para poder evaluar cómo se está sintiendo. Como resultado, tendremos más pensamientos relacionados a aquello que nos preocupa, ya que esa red neuronal ha sido encendida. Entonces comenzamos a crear más químicos en el cerebro que refuercen cómo el cuerpo se está sintiendo.

Una vez que ese estado de ansiedad fue creado, nuestro estado de ser crea un ciclo de retroalimentación del cuerpo al cerebro para activar más redes neuronales de preocupación, para de esta forma hacer que el cuerpo sienta más ansiedad, etc.

Cuando respondemos a nuestras emociones al pensar de la misma forma como nos estamos sintiendo, el cerebro fabrica más químicos para seguir alimentando al cuerpo con las mismas emociones y es así como se forma un estado de ser, ya sea bueno o malo.

Un estado de ser significa que este ciclo entre cl cuerpo y el cerebro ha sido completado. En el caso de la ansiedad, la emoción de la ansiedad alimentó a la ansiedad.

Pero pregúntate, ¿que pasaría, si en vez de sentir ansiedad, estrés o miedo, creas ese ciclo entre el cuerpo y el cerebro para sentir gratitud, felicidad o abundancia todo el tiempo?