Una Cosa A La Vez

Podemos tener, hacer y ser lo que queremos, pero ya que la concentración y el enfoque son nuestro poder más fuerte, esto significa que debemos enfocarnos en una cosa a la vez. Debemos ser definitivos y preguntarnos que es lo que queremos.

Haz una lista de todos tus deseos y enfócate en el primer deseo de la lista. Forma la demanda mental por esa cosa que deseas y continúa afirmando su manifestación hasta que sea algo real para tus cinco sentidos.

Hacer una cosa a la vez y hacerlo bien, es el camino más rápido al éxito y al logro, ya que cuando haces algo bien, eso aumenta tu capacidad y hacer algo bien es la forma en la que puedes manifestar completamente a diferencia de hacer algo rápido solo por completarlo.

Así que si tienes muchos deseos, anótalos en una lista y decide en cual te vas a enfocar primero. Una vez que hayas elegido, el siguiente paso es la contemplación en silencio de solo esa cosa que has elegido y con una confianza silenciosa, debes saber que ese deseo ya es tuyo aquí y ahora.

Tratar de hacer realidad varios deseos a la vez es como estudiar para tres exámenes diferentes al mismo tiempo, tu mente simplemente solo puede estar enfocada en un tema a la vez. No significa que no debas tener muchos deseos, al contrario, debes tener todos los deseos que tu ser te pida, pero primero debes elegir el más urgente o el más grande y enfocar toda tu atención y energía en ese deseo.

El problema es que muchas personas están acostumbradas a actuar de esa forma en su vida diaria. Cuando están en el trabajo, piensan en las vacaciones, cuando están lavando trastes, piensan en los problemas de dinero, cuando están de vacaciones, piensan en todo el trabajo que les espera. Los pensamientos se comportan como un mono yendo de rama en rama.

Digamos que ya has hecho tu lista de deseos y hay dos deseos en lo cuales te quieres enfocar y son de igual de importantes, por ejemplo, salud y dinero. Lo que debes hacer en este caso, es despertar e inmediatamente sentarte en una posición de meditación y por 30 minutos, enfocar todo tu pensamiento y atención en la afirmación “yo soy sano y perfecto” y simplemente SENTIRTE sano y completo por esos 30 minutos.

En la noche y antes de dormir, haces exactamente lo mismo, pero ahora enfocándote en “yo soy riqueza ilimitada” y simplemente SENTIR riqueza dentro de ti. Si te cuesta trabajo sentir esta emoción, imagina que empiezan a caer billetes del cielo y estás recibiéndolos de forma ilimitada. ¿Cómo te sentirías?

Ni siquiera pienses en cómo vas a recibir o cuando, tu único trabajo es simplemente concentrarte en la idea de riqueza y sentir lo más que puedas.

Lo importante es que tu mente esté en donde debe de estar en cada momento durante el día y que si tienes deseos, les dediques tiempo especial durante el día para contemplar la esencia de ese deseo a través de la meditación.

Enfócate en un deseo a la vez y comprobaras lo rápido que puedes manifestar cuando tu enfoque es claro y directo.