La emoción de la gratitud está asociada con niveles de felicidad y bienestar. Cuando nos enfocamos en nuestras bendiciones, incrementamos nuestro optimismo, así como nuestra fe y también reducimos niveles de estrés y depresión, mejoramos la función de nuestro sistema inmune y fortalecemos nuestras relaciones con las personas que nos rodean.
El objetivo de esta meditación es practicar cultivar la emoción de gratitud en nuestro interior.
Es fácil caer en la rutina de todos los días y de sentir estrés y preocupación por lo que pasa en el mundo externo, sin embargo, tenemos la opción de todos los días, ir a nuestro interior en donde podemos hacer comunión con nuestro ser verdadero y cultivar la emoción de la gratitud.
Practicar sentir gratitud todos los días tiene muchos beneficios físicos y psicológicos, especialmente, al reducir los pensamientos negativos de todos los días ya que la gratitud, gracias a la neuroplasticidad, nos ayuda a reestructurar nuestro cerebro para poder lidiar con la adversidad y los obstáculos de mejor forma.
El universo responde a lo que somos y la gratitud es la emoción que nos abre la llave de la abundancia y de las bendiciones y es la emoción que nos vuelve magnéticos para que atraer aquello que deseamos.
